Señor Presidente,
Costa Rica agradece los informes presentados en este tema de la agenda, así como el diálogo interactivo desarrollado el miércoles. Nos sumamos al discurso pronunciado por la delegación de Cuba, en nombre de la Comunidad de Estados de Latinoamérica y del Caribe (CELAC).
Además, como parte del Grupo Latinoamericano y del Caribe (GRULAC), nos complace copatrocinar la resolución de este año sobre los derechos del niño, que presentará la Unión Europea en nombre propio y del GRULAC.
De acuerdo con el informe del Secretario General A/68/257, la pobreza crónica es el mayor obstáculo para satisfacer las necesidades de los niños y proteger y promover sus derechos. Los niños deben estar en el centro de las consideraciones para enfrentar la pobreza y promover el desarrollo. Como lo señala la resolución que aprobó el documento final de la Sesión Especial sobre la infancia, en "un mundo apropiado para los niños” el desarrollo humano sostenible debe tener en cuenta el interés superior del niño. El documento adoptado en Rio, sobre “el futuro que queremos” también es claro en reafirmar que “la estabilidad económica, el crecimiento económico sostenido, la promoción de la equidad social y la protección del medio ambiente” deben lograrse al mismo tiempo que se aumenta “la protección, la supervivencia y el desarrollo de los niños hasta que hagan realidad todo su potencial, en particular mediante la educación.”
Los niños y las niñas, entre ellos los más pobres y marginados, como la niñez indígena, afrodescendiente, migrante y con discapacidad, son más vulnerables a la pobreza, las inequidades sociales y económicas, la degradación ambiental y el cambio climático. Para romper el ciclo intergeneracional de la pobreza y la exclusión social, es necesario mejorar el acceso equitativo y sin discriminación de los niños y niñas a los servicios públicos, en particular a la educación.
Los factores de vulnerabilidad no solo surgen de limitaciones económicas; también son producto de factores ambientales, sociales, culturales y hasta familiares. Como país, hemos alcanzado importantes logros en la promoción y protección de los derechos del niño, pero esos avances están expuestos a cambios negativos en el entorno económico, a fenómenos naturales y a desafíos multidimensionales, como la violencia, la delincuencia organizada y el narcotráfico. Por esto es necesaria la generación constante de capacidades para sostener los logros alcanzados. Y para acompañar esta tarea es necesaria la presencia de los fondos y programas de las Naciones Unidas en los países de renta media, y en particular la acción de UNICEF. En nuestro caso particular, UNICEF acompaña los esfuerzos nacionales en la lucha contra la pobreza, la reducción de desigualdades, el fortalecimiento de la salud, la educación y el cuidado y el desarrollo infantil, entre otros.
Más allá de los recursos financieros, siempre necesarios para mantener una operación sostenible, valoramos la asistencia y acompañamiento técnico de UNICEF y los conocimientos que genera por su acción alrededor del mundo. Valoramos, además, su legitimidad y capacidad de convocatoria para catalizar inquietudes y desafíos, acelerar procesos, y apoyar la articulación y coordinación de distintas instancias institucionales y actores sociales en la formulación de políticas de Estado inclusivas, de amplia base y largo plazo.
Señor Presidente,
Nos preocupan los efectos sobre los niños y adolescentes de delincuencia transnacional organizada y el narcotráfico, en especial en Centroamérica. Como lo señala el informe A/68/274 “…los niños de comunidades desfavorecidas son objetivos atractivos para las actividades de la delincuencia organizada. Corren el riesgo de ser reclutados y manipulados, mediante coacción, presión social o promesas económicas, para guardar o entregar drogas o armas, cometer delitos menores, mendigar en la calle o participar en otras actividades abusivas.” Esta situación genera estigmatización de los niños pertenecientes a grupos desfavorecidos y temor del público a la violencia de pandillas, que puede desembocar en la criminalización de niños y adolescentes y en una cultura de tolerancia de la violencia contra ellos.
Frente a los desafíos de la inseguridad, Costa Rica, con el apoyo del PNUD, ha formulado una Política Integral y Sostenible de Seguridad Ciudadana y Promoción de la Paz Social (POLSEPAZ). Su objetivo es preservar y promover la seguridad de las personas y la convivencia pacífica. Esta política, conceptualiza la seguridad como un asunto de convivencia y desarrollo humano. Desde esta base, adopta un abordaje integral y estratégico, orientado a atender la manifestación del fenómeno, pero sobre todo sus causas, entre las que destacan la falta de oportunidades, en particular para los niños y adolescentes.
Hacemos un llamado al sistema de las Naciones Unidas a prestar atención a estos fenómenos y apoyar a los países en sus esfuerzos por combatirlos.
Señor Presidente,
Como se reiteró durante el diálogo interactivo, el lugar de los niños es la escuela. En Costa Rica, estamos convencidos de que el proceso educativo debe ser una experiencia positiva, que los niños disfruten y que les ayude no solo a desarrollar conocimientos, sino a construirse a sí mismos y fortalecer su dignidad. Bajo estas premisas, se creó el programa de educación en Ética, Estética y Ciudadanía que busca también la promoción de la continuidad escolar, el fortalecimiento de la cultura de paz y la mejora en la convivencia social y democrática.
Además, en 2012 lanzamos el Programa Nacional para la Afectividad y la Sexualidad Integral, que incluye temas relativos a las relaciones interpersonales; la cultura, el poder y la responsabilidad; el placer como fuente de bienestar; el género; la identidad psicosexual; la salud reproductiva y los derechos humanos.
La inversión en educación y empoderamiento de los niños, las niñas y los jóvenes, es fundamental para que puedan convertirse en agentes transformadores e impulsores de un nuevo paradigma del desarrollo sostenible. Las tecnologías de la información y las comunicaciones han traído aparejados enormes beneficios y oportunidades para la educación, la socialización y el esparcimiento. El mismo informe A/68/274 reconoce que “…los niños y los adolescentes aprenden fácilmente a manejar de manera competente esas nuevas tecnologías y a explorar oportunidades de obtener información. Esas tecnologías promueven la adopción de decisiones, la creatividad y la innovación y amplían las redes sociales. De manera creciente, la tecnología, la educación, la innovación y la cultura son reconocidas como propulsoras del desarrollo, y cada vez se genera más conciencia sobre la necesidad de incorporar activamente a la juventud en estas tareas.”
Como lo mencionó la Representante Especial del Secretario General sobre la violencia contra los niños en su presentación, hace poco más de un mes Costa Rica fue anfitriona y coorganizadora, junto con la Unión Internacional de Telecomunicaciones, de la Conferencia Mundial BYND2015, sobre juventud, desarrollo y tecnologías de la información y comunicación. Con la participación presencial y virtual de miles de jóvenes de todo el mundo, se produjo la “Declaración de Costa Rica,” con ideas para la agenda de desarrollo después del 2015. Su contenido contempla la innovación; la educación y el intercambio de conocimientos; la salud; la participación y el ejercicio de la ciudadanía global; la seguridad cibernética; el respeto al medio ambiente, y la utilización de energías renovables y sostenibles.
Costa Rica considera necesario que las ideas, así como los derechos de los niños y las niñas y su bienestar, queden apropiadamente reflejados en la agenda de desarrollo post 2015.
Señor Presidente,
Manifestamos nuestro apoyo a los mandatos de la Representante del Secretario General para la cuestión de los niños en los conflictos armados y la Representante sobre la violencia contra los niños. Es necesario preservar su total independencia y proveer del presupuesto regular los recursos necesarios.
Finalmente, deseamos destacar, al igual que lo hace el informe A/68/267, la reciente aprobación del Tratado sobre el Comercio de Armas, en el que nuestro país, como uno de los siete coautores, tuvo gran incidencia. El Tratado constituye un robusto instrumento para la protección de los niños. Textualmente, la Representante para la Cuestión de los Niños y los Conflictos armados nos indica: “Cada vez existe más evidencia de que la disponibilidad generalizada de armas pequeñas y ligeras, a la que contribuye la regulación insuficiente del comercio mundial de armas, agudiza los conflictos y tiene un impacto desproporcionado sobre los niños. Existen además pruebas contundentes acerca de la correlación entre la proliferación de las armas pequeñas y ligeras y la práctica generalizada del reclutamiento y la utilización de niños durante el conflicto.”
El artículo 7.4 del Tratado establece que, antes de autorizar la exportación los Estados deben hacer una evaluación y, entre otros aspectos, “… tendrá en cuenta el riesgo de que las armas convencionales… o los elementos… se utilicen para cometer o facilitar actos graves de violencia por motivos de género o actos graves de violencia contra las mujeres y los niños.”
Para concluir, tenemos el honor de anunciar que el día de ayer la Asamblea Legislativa de Costa Rica aprobó el tercer Protocolo Facultativo relativo a un procedimiento de comunicaciones y esperamos depositar pronto el instrumento de ratificación. Hacemos un llamado a la ratificación universal de la Convención y sus protocolos.
Muchas gracias.