Señor Presidente Mi país lo saluda a Usted y a los demás miembros de la Mesa y agradece la convocatoria a esta sesión. Costa Rica se adhiere a la intervención realizada por el distinguido Representante Permanente de Chile en nombre los países miembros del Grupo de Río y desea realizar algunas apreciaciones en calidad nacional. Señor Presidente Costa Rica reconoce el valioso aporte del PNUD al desarrollo de nuestros países. Durante los últimos años éste ha sido de gran importancia para perfilar y ajustar estrategias de desarrollo, mejorar nuestro desempeño institucional y concertar actores múltiples en pro de objetivos comunes. También valoramos altamente la contribución del PNUD al posicionamiento del desarrollo humano como un tema prioritario de las agendas nacionales e internacionales, así como sus contribuciones conceptuales sobre Democracia, Desarrollo Humano Integral, Gobernabilidad, Estado de Derecho, Medio Ambiente, Desigualdad y Exclusión Social. Las aportaciones del PNUD han sido fundamentales para comprender y dimensionar el desarrollo de manera integral, en función de variables múltiples. Entre ellas están la sostenibilidad, la gobernabilidad, el 2 potenciamiento del capital humano, el empoderamiento de las mujeres, el impulso y la consolidación de la democracia, la expansión de los servicios sociales y la equidad. Esto implica que el desarrollo no consiste, exclusivamente, en promover el crecimiento económico y combatir la pobreza. Ambos son objetivos de enorme importancia, pero insuficientes. Así lo ha entendido esta Junta; así también lo ha entendido la Administración del PNUD. Así lo entienden Costa Rica y, estamos seguros, la mayoría de los países. Por tales razones, consideramos que este es un momento muy oportuno para repensar el actual criterio clasificatorio para la denominada ¨graduación¨ de los países, de cara al PNUD, que hasta ahora ha estado basado, únicamente, en el Ingreso Nacional per cápita. Gracias al PNUD, hoy en día contamos con herramientas de interpretación más rigurosas e integrales, como el Índice de Desarrollo Humano, que nos permiten ir un paso adelante en la medición del bienestar. Prescindir de este tipo de herramientas, y de otras dimensiones múltiples del desarrollo, como las ya mencionadas, para decidir sobre la llamada graduación, sería paradójico, además de inconveniente, no solo por sus efectos en los países que aún estamos esforzándonos por alcanzar el desarrollo integral, sino, también, por el mensaje que enviaría a toda la comunidad internacional. En el caso de Costa Rica, pese a mejoras en nuestro ingreso per cápita, aún tenemos una gran cantidad de vulnerabilidades económicas y sociales. Una, particularmente importante, afecta a sectores que han logrado salir de la pobreza, pero pueden precipitarse nuevamente en ella con gran facilidad. Para neutralizar estas debilidades, consolidar los avances logrados, impulsar otros y asentarnos por una ruta de desarrollo realmente sostenible, aún necesitamos el acompañamiento del PNUD, en pleno apego, además, a los principios de universalidad y progresividad. Señor Presidente, Como lo hemos expresado en anteriores ocasiones, Costa Rita considera que las acciones del Gobierno y de la sociedad civil se deben continuar complementando con la asistencia técnica especializada que brinda el Sistema de las Naciones Unidas, de manera particular el PNUD, en una gama amplia de opciones de proyectos que le permitan a nuestro país, y a otros de renta media, identificar nuevas alternativas de desarrollo humano y consolidar los avances logrados. Para esto, es indispensable seguir contando con su acompañamiento y presencia. Eliminarlo en estos momentos sería, de algún modo, penalizarnos por las mejoras logradas gracias, entre otras cosas, a un buen uso de la ayuda para el desarrollo.  Muchas gracias, señor Presidente